Personificar el espíritu. Entender el significado del asana

por Judith Lasater

Todo lo que recuerdo de mi primer clase de asana (postura) es el cielorraso. Entre movimientos se nos instruía recostarnos en nuestras alfombritas (mats) y descansar. Yo no recuerdo mucho qué es lo que hicimos, pero si recuerdo que yo quería más. A la mañana siguiente, en casa, practiqué lo que recordaba haber hecho, estaba enganchada y el asana se transformó en una parte de mi vida.

Lo que me llevó a la practica de asana fué una sensación intuitiva de que estos movimiento no eran simplemente "estiramientos"; parecían tener una conexión más importante con mi alma. Fue mas tarde después de años de entrenamiento que comencé a aprender los profundos simbolismos que cada asana representa. Ahora creo que cada asana representa un aspecto de mí misma y como tal, me ofrece una poderosa puerta hacia el interior. Así, para mucha gente la práctica del asana puede convertirse en más que un acto físico, puede ser una forma de meditación en movimiento.

La palabra "asana" es en sánscrito y en realidad esta en plural; la palabra correcta para una postura es "asan". Sin embargo, se tiende a utilizar "asana" para el singular y "asanas" para el plural, a pesar de que esta palabra no existe en sánscrito. Cualquiera sea la palabra que utilicemos, el asana es virtualmente tan antiguo como la civilización en sí misma. De hecho, hay talladuras anteriores al año 3000 antes de Cristo que muestran figuras sentadas en posición de Loto. Se dijo a veces que cada asana fué creada o "emergió" cuando un "rishi" o "habitante sabio del bosque" espontáneamente se movía hacia un asana durante profundas meditaciones. El asana refleja tanto nombres de animales como objetos, a la vez de tener nombres de sabios de la tradición Hindú. Las instrucciones para la práctica de asanas específicas pueden ser encontradas en libros Hindúes tan antiguos como el Siva Samhita y el Gherarnda Samhita, al igual que en el Hatha Yoga Pradipika.

Paradogicamente, en los Yoga Sutras de Patañjali, generalmente considerado como el libro más famoso sobre la práctica amplia del Yoga, no son dadas especificaciones sobre la práctica y el asana solo se menciona en tres versos, capítulo II v. 29, v.46 y v.47. Patañjali presenta el asana como el tercer paso en su escalera de práctica después de los preceptos éticos (yama) y de las prácticas prescritas (niyamas) y aparentemente espera que el discípulo explore más en el asana por sí mismo/a. A mí me resultan más interesantes que las técnicas específicas de la práctica, otras dos ideas sobre el asana. Primero, que el asana es tanto una práctica espiritual en sí misma y segundo, que la practica del asana puede afectar en forma beneficiosa nuestra relación para vivir una vida espiritual en un mundo moderno, lejos de los protegidos ashrams y de los retiros de la antigua India.

En nuestra cultura occidental de fines del siglo veinte, el asana tomó una cara diferente de la que probablemente Patañjali reconocería. A medida de que la practica del asana se ha transformado en mas conocida y aceptada, ha impregnado muchos rincones de la sociedad. El yoga asana puede ser encontrado en las revistas de moda al igual que en populares revistas de salud, y los medios rápidamente nos informan cuales son las estrellas de películas que estan ahora practicando yoga. Asana se ha vuelto una forma popular de ejercicio para aquellos que sufren de sobre practicar técnicas de entrenamiento físico. El asana es, por lo tanto, utilizado como un paliativo y como terapia para los daños físicos.

Tradicionalmente muchos maestros han enseñado que el valor principal del asana es preparar el cuerpo para la meditación al crear un espalda fuerte y piernas flexibles como para que el discípulo pueda permanecer sentado quieto durante largos períodos de tiempo. De esta enseñanza proviene la creencia de que las asanas son "mas bajas" o no tan espirituales "como la meditación".

Pero yo creo que la practica del asana tiene un potencial aun más grande en Occidente. Al comienzo puede que seamos capturados por el aliciente de la flexibilidad y la fuerza, pero nos quedamos por otra razón. Los científicos están constantemente "descubriendo" los caminos de conexión entre la mente y el cuerpo; de hecho, algunos hasta dicen que virtualmente no hay separación entre ellos. Los Yoguis estaban al tanto, yo creo, de esta conexión desde miles de años y las asanas honran esta conexión. Cuando practicamos asana honramos esta concexión también. Pero finalmente nos quedamos en la practica del yoga asana porque es una poderosa expresión no verbal de lo sagrado. Y practicar y vivir la parte sagrada de la vida es algo que lamantablemente le falta a mucha gente en Occidente en la actualidad.

La expresión de lo sagrado tiene que ver con la naturaleza de la práctica del asana en sí mismo. No importa cuantas veces unx haya practicado un asana, que cuando se lo practica cada vez es absolutamente nuevo. Cuando unx practica un asana, ese asana en particular, nunca fue practicado antes; cada asana es absolutamente de ese momento. Así la practica del asana es una creación artística viva que nunca antes existió y que no volverá a existir, así como este momento es único. Cuando practicamos asana tenemos la oportunidad de estar ´presentes en este momento específico. Cuando practicamos asana tenemos la oportunidad de traer nuestra atención al aquí y al ahora, a las sensaciones y a la conscientización que estamos sintiendo. Podemos observar nuestras reacciones, tanto positivas como negativas, hacia la postura; podemos observar las sensaciones de alivio y la dificultad que surge cuando nos estiramos y nos doblamos. De esto se trata la meditación, del deseo consciente de estar en el aquí y el ahora sin estar perdidxs en nuestros pensamientos sobre el aquí y el ahora.

La práctica del asana, y especialmemte savasana o postura del cadáver, es meditativa. Puede ser la piuerta de entrada a estados más profundos de meditación y otorga al estudiante el don más importante que puede ser otorgado. Este don se denomina desidentificación. En el capítulo I de los Yoga Sutras, Patañjali discute la falsa identificación de los pensamiento con el Uno Mismo. El enseña que en esta falsa identificación esta la raíz de todo el misterio. Luego el enseña que la practica del Yoga trata sobre disolver esta falsa identificación. El don más grande de savasana, por ejemplo, es que el estudiante puede comenzar a separarse de sus pensamientos. Mientras que unx se mueve más profundamente a través de la relajación unx comienza a entrar en otro estado en el que el pensamiento es experimentado como un fenómeno de superficie. Luego unx puede comenzar a experimentar un pequeño espacio entre el pensamiento y lo que se percibe como el Uno Mismo. Un maestro dijo, "El problema con nuestros pensamientos es que nos los creemos". El problema con creernos nuestros pensamiento es que luego podemos actuar a partir de ellos en una forma que puede causar sufrimiento para nosotrxs mismxs y para otrxs. Cuando se experimenta el pequeño espacio entre nuestros pensamintos y la conciencia que es el ámbito de los pensamientos, entonces los pensamientos no tienen el mismo poder. Así con la desidentificación viene la elección. Cuando unx se desidentifica del pesnamiento, unx puede elegir actuar a partir de ese pensamiento o no; ya deja de tener tanto poder como para controlar. Cuando unx puede actuar a partir de la elección, esto nos lleva a la libertad. El don de comenzar a entender el proceso de disidentificación es indiscutiblemnete el don más podereoso que se puede recibir.

Otro don inmendiato que uno puede ganar del asana tiene que ver con el contraste entre el movimiento y la quietud que cada asana representa. En el verso 46 Patañjali define el asana al escribir, "Quedarse en quietud es asana". Esto significa que el asana tiene dos componentes principales . Primero, asana es sobre quedarse quieto. La palabra que Patañjali usa se traduce como "perdurable". Es irónico que la mayoría de la gente piensa en el asana como en los "movimientos" del yoga, cuando en realidad el asana representa la habilidad del practicante de quedarse quietx. Y este quedarse quietx es una practica poderos. Cuando unx aprende a mantener una posición, unx aprende a dejar que la quietud del cuerpo se tranforme en un telón de fondo para el constante movimiento de la mente. Este arte de conscientemente quedarse quieto comienza a enseñar el arte de la meditación.

Para explicarlo mejor, durante las horas en las que normalmente estamos despiertos, tendemos a mover el cuerpo todo el tiempo, raramente nos sentamos quietos.

Puedo recordar la tortura de mis primeros años en el colegio. Aborrecía sentarme quieta en mi escritorio durante horas. Porque estamos normalemnte moviendo nuestro cuerpo al compás de los movientios de nuestra mente, y esto no es tan aparente. Pero cuando aprendemos a mantener la postura y a quedarnos quietxs, de pronto nos damos cuenta con claridad cuan agitada esta la mente. Este "darse cuenta" esta en el corazón de la práctica de la meditación. A partir de darnos cuenta de algo, tenemos capacidad de elección, tenemos la elección de continuar con la agitación o no.

El segundo punto que Patañjali hace sobre la definición de asana no solo tiene que ver con quedarse quieto. Patañjali nos enseña que para que una posición sea un asana debemos permancer allí con "sukham" o tranquilidad. Esta es la idea más desfiante. Es generalmente cierto para la mayoría de nosotrxs que cuando nos movemos a un asana estamos, al comienzo, más atentos a la dificulatad, a la dureza y hasta a la resistencia que sentimos en ese momento. Es extraño que tengamos una sensación de tranquilidad o facilidad. Entonces, que es lo que Patañjali quiere decir con la utilización de la palabra "tranquilidad" en relación con el asana?

Una forma en la que yo interpreto esta tranquilidad tiene que ver con mi deseo de estar en esa posción. La tranquilidad entoces proviene de mi interpretación de la dificultad, no en la dificulatad en sí misma. En otras palabras, la posición puede continuar estirándome y desafiándome, quizás esto nunca va a cambiar. Pero yo puedo quedarme "tranquilx" en mi interpretación de esta dificultad. Puedo elegir permanecer presete y permitir que la dificultad este allí sin lucharla, sin reaccionar o intentar cambiarla.

La practica más amplia del yoga no trata de arreglal nuestra vida como para que sea perfecta y fácil y sin desafíos. En verdad tiene más que ver con utililzar la disciplina que encontramos en la práctica del asana (y también en las otras prácticas del yoga) para permitirnos permanecer "con tranquilidad" en medio de la dificultad. Esta es la verdadera medida de la libertad. Cuando aprendemos esto, luego todo lo que hacemos y todo lo que decimos se transforma en un "asana", una posicipon de cuerpo, mente y alma que requiere la atención que nos trae hacia el presente.